Independientemente de la industria a la cual nos dediquemos laboralmente estoy convencida que todos hemos sufrido el mayor temor que un trabajador de industria creativa puede tener y es el bloqueo creativo, conocido también como ese momento en el cual las ideas no fluyen, no hay inspiración alguna y la desesperación comienza a apoderarse del momento encontrándose la mente completamente en blanco sin encontrarle gusto alguno a nada de lo que poco a poco va surgiendo en la mente. En estos días este temido monstruo se apodero de mí y debo confesar que es la peor sensación cuando sabes que debes cumplir con unos tiempos para entregar tu trabajo creativo y lo que es peor comienza la procrastinación o nos enfocamos en otras cosas pendientes con tal de no aceptar que estamos en un bloqueo al cual no deseamos enfrentarnos, y aunque creemos que forzándonos a sentarnos delante de un computador las cosas simplemente irán fluyendo y aunque el término que siempre utilizamos es que nuestra mente se encuentre en blanco, la realidad es que se encuentra abrumada de tanto pensar o de tantas cosas acumuladas en ella y es por esto que debemos darle un empujón para hacer que esta se despeje y con ello poco a poco encontrar la inspiración o esa musa que nos hacía falta para hacer volar nuestra creatividad nuevamente:
Lee ese libro que dejaste para después o que no has empezado: ese libro que sea de tu completo agrado y dedica un tiempo a él, estarás haciendo una actividad diferente, cumpliendo tu propósito de leer ese libro que siempre ves cuando pasas por ahí y llevando tu mente a un nuevo mundo a través de las letras que se convierten en ideas a futuro.
Llama y sal con amigos: Nuestra mente necesita también distracción, reírse, soltar toda tensión que pueda tener y no hay nada mejor para ello que un buen rato con amigos.
Regálate un postre o tu comida favorita: prémiate por el esfuerzo realizado, disfruta comiendo algo que realmente te encante, esto estimulara a tu mente.
Retoma la serie que has pausado: Las series son una excelente forma de ver el mundo desde otros puntos de vista, conocer nuevos mundos, otras realidades e incluso una ficción que nos hace soñar.
Conéctate con la naturaleza: Tan necesario, pero tan olvidado realmente, busca un jardín o parque cercano o incluso con observar desde tu ventana o balcón, conéctate con la naturaleza y recárgate de su buena energía, suelta aquello que te acumula y déjate inspirar por su belleza.
Ambienta tu lugar de trabajo: los aromas estimulan nuestros sentidos y cada uno tiene características propias por ejemplo la hierbabuena ayuda a la concentración, así como la lavanda a la relajación, busca el aroma que más te guste, y ambienta tu lugar de trabajo, es una excelente forma de encontrar motivación y de hacer de este un lugar agradable lleno de sensaciones idóneas para encontrar inspiración.
Pon algo de música: Así como ambientamos con aromas nuestro espacio de trabajo, ambientemos nuestros oídos, este es un truco que personalmente me ha funcionado y ha sido de gran ayuda para esos momentos donde el trabajo no fluye, busco esa canción que tengo pegada en el momento, o aquella que más me guste y comienzo a oírla, si te sientes a gusto cierra tus ojos y aprecia cada parte de ella, un momento de relajación y distracción antes de iniciar o déjala de fondo para continuar labores.
Disfruta el paisaje: estamos tan concentrados en el trabajo y vivimos en un mundo tan afanado que no nos tomamos ni un minuto para ver por nuestra ventana. Por unos cuantos minutos levantemos la vista del computador y observemos nuestro alrededor, nuestro paisaje sea cual sea y apreciemos lo que en el vemos, las mejores ideas a veces vienen de nuestro al rededor.
Detox tecnológico: creemos que para encontrar inspiración y despejar la mente basta con entrar un rato a Instagram o Facebook, pero la realidad es que muchas veces esto abruma más a nuestra mente. Tomemos un descanso del celular y del computador, puede ser el fin de semana o un día o simplemente por una hora olvidemos que esto existe y reconectémonos nuevamente con nosotros mismos.
Practica un hobby: tener un hobby es de las mejores actividades para despejar nuestra mente, algo que nos libere del estrés constante y que disfrutemos profundamente, que sea nuestro lugar de escape cuando realmente necesitamos liberarnos. Nada mejor para estimular nuestra mente y descansar que hacer algo por diversión.
Haz ejercicio: está comprobado que así sea una hora al día el ejercicio reduce el estrés, aumenta la capacidad cerebral y mejora la memoria, además de las ventajas ya conocidas para nuestros músculos y demás partes del cuerpo.
Crea moodboard: ya sea en Pinterest o realizando recortes de revistas, selecciona y acumula imágenes que llamen tu atención, estas no deben tener un objetivo o una intensión, simplemente ve creando un moodboard o tablero con esas imágenes que veas y te gusten y luego de un tiempo observa ese tablero, encontraras similitudes, ideas, colores e incluso una armonía que se convertirá en fuente de inspiración.
Lluvias de ideas: el bloqueo creativo nos hace descartar toda idea que surge en nuestra mente precisamente por esa nube negra que nuestra mente ha creado pero muchas veces esas ideas no son del todo malas simplemente no están completamente desarrolladas y desecharlas hace que las olvidemos cuando quizás en un futuro las necesitemos, anotemos todas estas ideas en algún lugar sin emitir juicios acerca de estas, simplemente escribámoslas y dejémoslas ahí, pasado un tiempo retomemos esas ideas y encontraremos herramientas valiosas o bocetos y trazos que podemos transformar en tesoros para continuar desarrollando nuestro trabajo.
Aprende a descansar no a renunciar: especialmente cuando somos emprendedores, no existe diferencia entre nuestro tiempo libre y nuestras horas de trabajo y sentimos una culpa terrible si dedicamos una pequeña parte del día a descansar y más cuando aún no alcanzamos esas metas que nos hemos trazado, pero debemos aprender que es justo y necesario el descanso para recargas fuerzas, energías y equilibrar nuestro ser nuevamente, entender que necesitamos del descanso para alcanzar nuestras metas y trabajar con mayor entusiasmo.
Aunque pareciera una lista de actividades para procrastinar el deber, realmente estas actividades nos ayudan a trabajar nuestra mente de una manera distinta sin la presión de tener que pensar y crear en ese momento, simplemente ser y fluir y conectarnos nuevamente con nuestro ser interior haciendo actividades que nos apasionan y nos gustan y que nos hacen olvidar por un rato del estrés que nos provoca ese bloqueo creativo soltando esa mente en blanco y dándole color a través de otras ideas, momentos e imágenes, y sin pensarlo ya sea después o incluso en medio de estar realizando estas actividades nuestra mente se ilumina y nuevamente la creatividad aparece brotando por nuestros poros, el descanso es esencial e incluso la creatividad necesita descansar para encontrarse y retomar el camino.