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  • Foto del escritorNatalia Mendoza Ballesteros

¿Cómo llegue a Pineapples?


 

Hace unas semanas les conté a través de mis historias en Instagram una noticia que me tiene demasiado feliz, desde el mes de julio soy una de las embajadoras oficiales de Pineapples, una marca nacional de moda y aunque sé que muchas saben de esta y su camino hoy quiero contarles como llegue a hacer parte de este grupo lleno de poder y amor por la vida.


Imagen tomada de la cuenta oficial @pdhs_official


Desde que estaba pequeña cada vez que se presentaba una oportunidad o debía hacer alguna pregunta pero me daba miedo mi mamá siempre me ha dicho: “hija lo único malo que puede pasar es que digan no” así que un día me encontraba haciendo mi habitual estudio de mercado en Instagram cuando me aparecieron las historias de Pineapples en las cuales contaban que abrían una convocatoria para encontrar a su próxima embajadora de marca ingresando a un link para inscribirse y a través de un pequeño escrito contar por qué nos gustaría hacer parte de esta marca; a pineapples la conocía desde hacía ya un buen tiempo, le venía siguiendo el rastro por redes, sus pasarelas en Colombia moda y Bogotá fashion week y conectaba no solo con sus diseños sino también con su forma de ver la moda, de una manera divertida donde cada quien pusiera sus propias reglas al momento de vestirse, amaba cada estampado, el volumen en sus prendas, su manera de contar historias en cada colección y me reía con cada meme compartido en sus historias porque reflejaban situaciones y pensamientos que todas alguna vez hemos vivido o hemos pasado, sentí que era el destino hablándome, y justamente uno de mis propósitos de este 2022 era escuchar aún más las señales que la vida me ponía en el camino, la frase de mi mamá vino a mi mente y sin vacilar ni medio segundo hice click en ese enlace y comencé a redactar un texto que realmente me nació para contarles quien era yo, mi amor por la moda y la conexión que sentía con Pineapples. El tiempo paso y justamente en medio de unos días de desconexión, de esos en los que el síndrome del impostor invade y necesitaba distraerme y recordar mi valor en lo que hago me llega una notificación, era un DM de Pineapples, yo no lo podía creer, la vida siempre encuentra formas de hablar y de demostrar que vas por el camino correcto y la vida me hablo a través de ese mensaje, como si fuéramos amigas de toda la vida recuerdo que comenzamos a hablar con Caro, la encargada de redes y contactos quien me daba la bienvenida y me contaba lo mucho que les había gustado no solo mi escrito, sino mi trabajo, mi contenido en redes y mis post en Business à la mode, inmediatamente intercambiamos números y a la semana siguiente Joha su creadora me estaba llamando personalmente para darme la bienvenida, en ese momento entendí que no solo admiraba a Pineapples por lo descrito anteriormente, también compartíamos valores que se reflejaban en la marca y en quienes hacían parte de esta y cuando en sus redes se referían a la construcción de una comunidad era algo que se tomaban muy en serio, el construir un marca por y para las mujeres, a partir de ese momento comenzó mi camino con Pineapples y yo comencé a aprender aún más de esta comunidad, Pineapples es una marca colombiana creada hace aproximadamente 5 años por Johanna Nodier, una marca que busca romper reglas y estigmas impuestos hacia la moda, una marca donde la única regla es divertirse a través de la moda y el hacer del vestir un medio para expresar, para hablar y contar, sus colecciones cuentan historias, se inspiran en situaciones, vivencias y expresiones artísticas, el feminismo es uno de sus temas centrales y la sostenibilidad es uno de los pilares fundamentales de Pineapples, una sostenibilidad entendida desde sus tres ejes: cuidado del medio ambiente haciendo uso del 90% de sus telas en materiales reciclables y la incorporación de bolsas a base de maíz, velan por el cuidado y el trato justo de su equipo de trabajo y aportan a la sociedad a través de su apoyo a diversas causas, fundaciones u organizaciones, así como el hacer voz a diversas situaciones que involucren los derechos humanos. Pineapples para mí es un ejemplo de que las acciones hablan mucho más fuerte que las palabras y son esas mismas acciones las que construyen una comunidad que se identifica, cree y se fideliza con una marca que con orgullo portan, hoy estoy muy orgullosa de hacer parte de este equipo, de crecer juntas y más importante aún crear valor para esa comunidad que día a día se fortalece.

Mi primera misión como embajadora fue entrevistar a Joha para conocer un poco más de su historia así que por acá les comparto también el link para que conozcan aún más de Pineapples y se enamoren tanto como yo de su esencia y sus prendas:

Gracias Pineapples por confiar y creer en mí, que comience un viaje y un camino lleno de proyectos y mucha moda.

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