Ante situaciones como las que estamos afrontando en estos momentos la mejor manera de llevarlas es adaptándonos a los cambios creando nuevos hábitos y acciones que contribuyan con nuestra responsabilidad como ciudadanos pero que a la vez nos permita continuar con nuestras labores diarias de una manera diferente pero efectiva cuidándonos a nosotros y con ello cuidando a los demás. Una excelente solución es adaptarnos a trabajar desde casa, lo que comúnmente llamamos teletrabajo o home office y aunque para muchos todavía esto suene como algo difícil de llevar a cabo es una medida más que eficiente para permitirnos continuar avanzando desde la seguridad de nuestros hogares. Es por esto que mi post de esta semana he decidido dedicarlo a darles algunos consejos o tips prácticos, pero realmente útiles para que estos días de trabajo en casa sean agradables y productivos, pero sobre todo que entendamos que es algo más que necesario para prevenir y proteger:
Ponernos un horario: Al trabajar en casa pensamos que tenemos todo el tiempo del mundo y nuestras horas libres terminan convirtiéndose en horas de trabajo y sin darnos cuenta terminamos sin descanso alguno, es importante ponernos un horario tal cual como si estuviéramos en oficina y de esa manera respetar nuestro tiempo y respetar el de otros desde la distancia física y la cercanía virtual.
Bañarnos y colocarnos ropa cómoda diferente a la pijama: Quedarnos en pijama es la solución fácil al escuchar trabajo en casa, sin embargo nuestro cuerpo necesita disposición para arrancar el día así que no importa la hora pero acostúmbrate a bañarte y vístete con ropa cómoda, no es necesario excedernos en nuestro arreglo lo importante es sentirnos cómodos pero preparados para comenzar nuestra jornada laboral desde casa.
Adecuar un espacio para trabajar diferente a nuestra habitación: Recuerdo mucho mi época de estudiante cuando me engañaba a mí misma diciéndome que estudiar en mi cuarto me permitiría estar más concentrada y en silencio, pero la realidad es que esto jamás pasa, tenemos demasiados distractores y el peor de todos: nuestra cama, así que ya sea el comedor, un estudio o incluso en una mesa en tu balcón, dispone de un lugar para que este sea tu espacio de trabajo durante este tiempo de aislamiento que te permita mantener una buena postura y un adecuado espacio para llevar a cabo tu home office.
Descansar: Estar en casa no significa excedernos en trabajo u horas extras de este mismo, tomate un tiempo para descansar o realizar pausas activas, da un paseo por tu casa y si vives acompañado charla un rato con ellos, ahora más que nunca esto es esencial para despejar nuestra mente y cambiar un poco de ambiente.
Recuerda tomar aire fresco: Es verdad que no podemos salir, pero esto no nos impide mirar a través de nuestras ventanas o salir a nuestros balcones o jardines a tomar un poco de sol y aire fresco, la naturaleza siempre será una excelente forma de recargarnos de buena energía.
Realizar ejercicios o estiramientos en casa: Aprovechemos la tecnología y busquemos tutoriales en YouTube o en Instagram de diversos ejercicios o estiramientos que podamos realizar desde nuestros hogares lo cual contribuye con nuestro sistema inmunológico y rompemos con la rutina haciendo algo diferente.
Respetar los fines de semana como si se tratara de un horario de oficina: trabajar desde casa es como si trabajaras en una oficina y así como te pones un horario para realizar tus actividades laborales en el día tomate un descanso los fines de semana, que sean intocables y olvídate de tu espacio de trabajo por esos dos días dedicando ese tiempo al autocuidado y el descanso.
Aprovechar este tiempo en casa para evaluar nuestras empresas y realizar actividades internas: Muchos de los me leen sé que son emprendedores como yo y aunque la gran mayoría trabaja desde casa nuestra rutina también implica el visitar clientes, realizar asesorías o vender nuestros productos a través de terceros sin embargo las circunstancias nos obligan a mirar un nuevo panorama, así que este tiempo en casa aprovechémoslo para realizar otras actividades vitales de nuestra empresa y marca que muchas veces postergamos como lo es evaluar cada una de nuestras estrategias y acciones de marca, realizar inventarios, estudiar la rotación de nuestros productos, estudiar nuestro mercado, realizar un diagnóstico de la situación y de nuestro sector para estar preparados ante cambios que se vayan a presentar, dedicarle tiempo a las redes sociales pero sobre todo cuidemos a nuestros clientes estableciendo relaciones con ellos de manera virtual.
Crea hobbies desde tu hogar: Ya sea cocinar, leer, ver series, jugar juegos de mesa, realizar cursos virtuales o cualquier otra actividad que te invite a salir de la rutina, a hacer actividades totalmente diferentes y productivas que te permitan mantenerte activo, en muchas de estas podemos encontrar incluso nuevas oportunidades de emprendimiento.
Desconectémonos: Se vale por momentos en el día desconectarnos completamente, disminuir el uso de las redes sociales y evitar los noticieros, el bombardeo de información no para y necesitamos tomar un respiro de la situación para evitar saturarnos y caer en pánico.
Recuerden que el cuidarnos es tarea de todos y que el cuidar de nosotros contribuye con el cuidado de nuestras familias, amigos, conocidos y desconocidos, es una época de paciencia y adaptación y desde nuestras casas con pequeñas acciones podemos contribuir realizando diversas actividades que incentiven el autocuidado tanto nuestro como de nuestras empresas. Sigamos construyendo nuestra comunidad a través de los lazos virtuales recordando siempre que sin contar el número de seguidores influimos en la vida de alguien más así que seamos voceros de la importancia de quedarnos en casa, protegernos y tomar consciencia.
