Como cada 28 de octubre, es decir mañana, se celebra el día internacional del diseñador de moda, sastre, modista y costurera, profesiones y oficios realmente importantes no solo para el sector de la moda, también para la sociedad en general desde el inicio de la humanidad. La moda o mejor dicho el vestir comenzó como un acto para proteger el cuerpo humano de las inclemencias del clima pero a medida que el tiempo fue pasando y con ello el avance y la civilización de la sociedad las
funciones del vestir fueron poco a poco tomando nuevos roles, funciones e importancia, desde el antiguo Egipto y la antigua Grecia se habla de las costureras quienes eran las encargadas de crear los trajes especialmente de las altas sociedades, trajes donde evidentemente se comenzaba a notar la diferencia entre clases o rangos, la opulencia y las características para representar grupos dentro de la sociedad, uso de linos, pinturas a mano, pedrería entre otros elementos que hoy en día aún son utilizados acorde a la evolución, elementos que a la vez nos ayudan a situar periodos de la historia, entender la misma y las condiciones en las que vivían acorde a su indumentaria, conforme fue pasando el tiempo estos oficios fueron tomando cada vez más relevancia para vestir a la sociedad, en el siglo XV la moda ayudaba a representar la realeza y a la vez la burguesía surgiendo las modistas en el caso de las mujeres para mandar a hacer sus vestidos y los sastres para crear trajes a la medida en los hombres y la aparición de diseñadores de moda como lo fue Charles Frederick Worth en el siglo XIX, quien se considera el padre de la alta costura, fue lo que poco a poco hizo que la moda fuera tomando forma como un medio no solo para vestir a la sociedad, sino también para representar a las personas, representar las culturas, tradiciones, la moda fue el medio para diferenciarnos entre personas, ya no vestíamos en masa únicamente para protegernos del clima, ya se hablaba de gustos, clases sociales, culturas y civilizaciones con sus costumbres y la moda era el medio para plasmar lo que eran como civilización para diferenciarse entre culturas y a la vez diferenciarse como personas, aunque siempre han existido tendencias, la moda siempre ha sido un medio para expresar lo que somos y la evolución de esta misma nos muestra a su vez la fuerza que ha cogido la moda más allá de lo banal para contar la historia.
Si nos sentáramos a ver una línea del tiempo con los trajes típicos de cada época desde el inicio de la humanidad podríamos observar como cada cambio en el vestir está relacionado con los hechos históricos del momento, eventos que la sociedad tuvo que vivir, revoluciones, independencias, la autonomía del ser humano, al hablar de épocas pasadas o nombrar años icónicos como los 70 es imposible hacerlo sin traer a nuestra mente las prendas que marcaron estas épocas y es por esto que conmemorar el día del diseñador de moda, costurera, sastre y modista no es un hecho tomado a la ligera, estas personas que por años y generaciones se han dedicado a estos oficios y profesiones son los encargados de marcar la historia, de que las generaciones actuales seamos capaces de recordar las pasadas y su historia en base al vestir, de entender por qué usaban lo que usaban basado en contextos sociales y son los encargados de que las generaciones venideras nos entiendan a nosotros, los cambios y los hechos que hemos vivido como lo fue el vestir durante una pandemia y la necesidad de añoranza en el pasado con el regreso de los 2000, gracias a los diseñadores de moda, sastres, modistas y costureras la historia ha hablado, ha mostrado su evolución, las culturas se diferencian, la moda nos narra la historia de los pueblos, la historia de las regiones, gracias a la moda y los trajes de vestir entendemos momentos históricos, entendemos la liberación de la mujer, pero más importante aún la moda nos invita a soñar, nos invita a ser nosotros mismos, la moda se inspira en su alrededor, en lo que vivimos, en lo que sentimos, en lo que hacemos para expresar en prendas lo que muchas veces no somos capaces de decir con palabras, ese es el poder de estas profesiones, los escritores dejan libros para la historia, los diseñadores, costureras, modistas y sastres dejan prendas para contar la historia y ayudarnos a escribir nuestra propia historia.