¿Qué precio tiene…?
¿Qué vale…?
¿Qué cuesta…?
¿Significan lo mismo en tu mente? O ¿Qué te imaginas al decir cada una de estas palabras?
Cuando vamos a comprar algo o cuando estamos vendiendo solemos usar estas 3 palabras con un mismo fin, pero ¿qué pasa
si te digo que las 3 no significan lo mismo y que cada una tiene un sentido detrás que deberíamos aprender a usar, especialmente cuando de vender se trata?
Por supuesto las 3 están relacionadas con dinero, pero desde un concepto único que las hace diferentes pero igual de necesarias cuando tenemos una marca y más cuando queremos comunicarnos con nuestros clientes, puede que estos no conozcan la diferencia entre estas 3 pero si aprendemos a usarlas como es debido cobrara un gran sentido en la mente de nuestros clientes y por supuesto para la comunicación de nuestra marca y la magia que entregamos en cada producto y parte de esta, así que hablemos de cada una:
Todo ese dinero que inviertes en tu marca para elaborar tus productos, realizar tus campañas publicitarias, empaques, distribución, promoción y demás de tu marca es lo que se le conoce como COSTO, la base o raíz desde donde nace lo que le vamos a ofrecer al mercado. Lo que nuestros clientes y consumidores pagan para obtener nuestros productos y/o servicios es lo que llamamos PRECIO.
Y el VALOR hace referencia a los beneficios, la diferenciación y el cómo nuestros productos satisfacen las necesidades de nuestros clientes, también está determinado por la percepción que nuestros clientes tienen y han creado sobre nuestra marca y lo que esta ofrece.
Teniendo claro esto ahora te pregunto ¿en el mercado compites por precio o compites por valor? ¿tus clientes te eligen por tu precio o te eligen por tu valor? 2 conceptos diferentes, pero igual de importantes para nuestra marca; costo, precio y valor son necesarios y tener claridad en su diferencia es lo que permite que entendamos justamente lo que nuestra marca vale para transmitirlo.